La Comisión Económica para América Latina y el Caribe advierte que la economía mexicana enfrentará un tercer año de desaceleración, afectada por menor inversión, caída en remesas y debilidad en el sector manufacturero.
Morelia, Michoacán.— La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) mantuvo sin cambios su pronóstico de crecimiento económico para México en 2025, estimando un avance del Producto Interno Bruto (PIB) de apenas 0.3%, tal como lo había proyectado en abril pasado.
Al presentar el Estudio Económico de América Latina y el Caribe, el secretario ejecutivo del organismo, José Manuel Salazar Xirinachs, explicó que este bajo crecimiento responde a diversos factores, entre ellos, la desaceleración de Estados Unidos —principal socio comercial de México—, la caída en la inversión derivada de la incertidumbre por nuevos aranceles, la disminución en las remesas y la pérdida de dinamismo en el empleo manufacturero.
De cumplirse este pronóstico, México sumaría tres años consecutivos con tasas de crecimiento a la baja: 3.4% en 2023, 1.4% en 2024 y 0.3% en 2025, ubicándose nuevamente por debajo del promedio regional proyectado en 2.2%.
Durante una conferencia de prensa remota, Salazar Xirinachs señaló que incluso antes del actual contexto de incertidumbre comercial, la economía mexicana ya mostraba signos de desaceleración debido al enfriamiento del consumo interno y la demanda doméstica.
Sobre el impacto social, el secretario de la Cepal advirtió que la caída en las remesas —que representan el 3.5% del PIB de México— afectará directamente al consumo de las familias receptoras, muchas de ellas en situación de pobreza, lo que podría profundizar las brechas sociales si no se toman medidas compensatorias.
La Cepal recomendó seguir monitoreando el entorno internacional y fortalecer las políticas internas para reactivar la inversión y proteger el consumo de los sectores más vulnerables.