El gobierno de China expresó su rechazo a los nuevos aranceles que México planea aplicar a autos y otros productos, argumentando que estas medidas afectan sus derechos comerciales.
El gobierno de China manifestó este jueves su oposición a los aranceles que México planea aplicar a productos de origen chino, entre ellos automóviles y autopartes. Las nuevas medidas contemplan incrementos de hasta 50% y forman parte de un paquete que abarca 17 sectores estratégicos.
En conferencia de prensa, el portavoz del Ministerio de Exteriores, Lin Jian, señaló que su país “se opone firmemente a cualquier coerción bajo distintos pretextos, lo que socava los derechos e intereses legítimos de China”. Además, reiteró que China promueve una globalización inclusiva y rechazó el unilateralismo y el proteccionismo.
De acuerdo con la Secretaría de Economía, México impondrá el arancel máximo permitido por la Organización Mundial de Comercio (OMC) a 1,463 fracciones arancelarias. En el caso de los automóviles, el gravamen subirá de un rango actual de 15 a 20% hasta 50%, mientras que en autopartes pasará de un rango de 0 a 35% hasta 10 a 50%.
La decisión ocurre en un contexto de creciente déficit comercial con China en el sector automotriz. En 2024, las exportaciones mexicanas de autos hacia ese país sumaron 262 millones de dólares, la cifra más baja desde 2010. En contraste, las importaciones de vehículos chinos alcanzaron un récord de 5,332 millones de dólares, más del doble que en 2022.
China pidió a México acompañar los esfuerzos internacionales para impulsar la recuperación económica global y el desarrollo del comercio, al tiempo que expresó su disposición a mantener el diálogo.
